Las Cinco Prácticas de Mala Fe Más Comunes Utilizadas por las Compañías Aseguradoras para Negar una Reclamación o Pagar Menos de lo Debido

Las compañías aseguradoras tienen el deber de actuar siempre de buena fe y de forma justa con sus asegurados.  Estas obligaciones y/o deberes jurídicos se encuentran previstos en los códigos estatales en materia de seguros.  En términos sencillos, una práctica de mala fe es cuando una compañía de seguros no actúa conforme a los intereses de sus asegurados.  Desafortunadamente, este tipo de prácticas desleales son demasiado comunes, principalmente en el contexto de desastres naturales como tormentas de viento y/o granizo.

Es bien sabido que las compañías aseguradoras tienen como fin principal el lucro.  Con la finalidad de alcanzar sus objetivos financieros, las compañías de seguros, como todas las empresas comerciales, tienen que reducir sus gastos al máximo, lo que incluye disminuir el número de pagos de reclamaciones.  Esto lo logran quedándose con las primas de seguro que les pagan sus asegurados y negando las reclamaciones que presenten sus asegurados, aunque dichas reclamaciones sean válidas.  Las compañías de seguros pueden llegar a ser sumamente creativas al momento de inventar razones para negar el pago de reclamaciones, o pagar menos de lo debido.  Esto sucede con mayor frecuencia en las reclamaciones de seguros de casa-habitación.  A continuación, se enlistan las cinco prácticas de mala fe más comunes utilizadas por las compañías aseguradoras para negar una reclamación o pagar menos de lo debido:

1. Engañar al asegurado con respecto al derecho que tienen de contratar a un abogado. Es muy común que las compañías de seguros le oculten al asegurado que los honorarios legales serán cubiertos por dicha compañía en caso de que el asegurado pruebe que se actuó de mala fe por parte de dicha compañía.
2. No realizar inspección exhaustiva de los daños. En estos casos, el ajustador de la compañía de seguros ignora o es omiso en inspeccionar a detalle todos los daños.
3. Alegar que los daños son preexistentes. Es posible que el ajustador de la compañía de seguros alegue falsamente que el daño materia de la reclamación ya existía o que el mismo se ocasionó por el uso o desgaste natural de la casa.
4. No hacer nada. Las compañías de seguros pueden simplemente no hacer nada, “darle vueltas” al asunto, o simplemente retrasar el pago de la reclamación esperando que pase el periodo de prescripción.
5. Hacer propuestas de pago de forma espontánea o en etapas muy tempranas del proceso con la finalidad de obligar a los asegurados más necesitados a negociar su reclamación, por más injusto que sea el pago.

Definitivamente hay muchas más tácticas utilizadas por las compañías de seguros tendientes a negar el pago de una reclamación o pagar menos de lo debido, sin embargo, éstas son las más comunes.  Por tal motivo, en caso de que tu casa o propiedad haya sufrido daños con motivo de una tormenta de granizo y sientes que tu compañía de seguros te está negando indebidamente el pago de tu reclamación o te está pagando menos de lo debido, debes de contactar a un abogado con experiencia en materia de seguros.

Los abogados de la Firma de Abogados Amaro, cuentan con amplia experiencia lidiando con compañías de seguros que actúan con mala fe.  De hecho, algunos de sus abogados llegaron a trabajar como abogados de compañías de seguros antes de unirse a la firma.  Dichos abogados entienden lo que es estar del otro lado de la mesa, y por ello entienden a la perfección las tácticas que comúnmente utilizan las compañías de seguros, por lo que usan este conocimiento para ayudar a dueños de propiedades a luchar por un trato justo.  Nuestras consultas son gratis.  No tomaremos su asunto si no creemos que podemos ayudarle.  Cuando una compañía de seguros actúa con mala fe, tienen la obligación de pagar los honorarios de abogado.  Por lo tanto, nuestros honorarios se pagarán siempre y cuando ganemos el asunto.  Le recomendamos ponerse en contacto con nosotros para una evaluación gratuita de su asunto.