¿Qué Tan Común es que un Asunto de Lesiones Personales Termine en Juicio?

Es común que la mayoría de las personas que resultan lesionadas en un accidente automovilístico, en el trabajo, o por cualquier otra causa, y que se vean obligadas a contratar los servicios de un abogado cuando la compañía aseguradora de la parte contraria no quiere aceptar responsabilidad, piensen que su asunto va a acabar en juicio.  Por lo regular las compañías aseguradoras prefieren invertir su dinero en una representación legal que pagarle a la parte lesionada lo que le corresponde.  Pero a pesar de ello, son muy pocos asuntos lo que realmente terminan en juicio y a continuación te exponemos los motivos:

Por lo regular los juicios son sumamente caros.  Un juicio en Estados Unidos, por más simple que sea, se tarda por lo menos un día completo.  No obstante, lo más costoso es todo el trabajo y esfuerzo que se invierte en los meses previos juicio.  Además, no hay que perder de vista los honorarios que se tienen que pagar a los peritos para que rindan sus opiniones en el juicio correspondiente.  En caso de que se dicte una sentencia desfavorable, en la mayoría de los casos se tendrá que interponer un recurso de apelación incrementando aún más los gastos de las partes.  Básicamente, los gastos relacionados con un juicio son mucho más altos que llegar a un acuerdo conciliatorio con la parte contraria.

Adicionalmente, hay poca certeza jurídica en los juicios ya que es el jurado el que tiene la última palabra.  Es posible que en algunos casos el jurado no crea en las declaraciones de los testigos o que consideren que los documentos con los que se comprueben los gastos médicos no están suficientemente relacionados con el accidente o que dichos gastos eran innecesarios.  Sin embargo, viendo el otro lado de la moneda, hay casos en los que el abogado de la parte demandada, así como su compañía de seguros valoran el asunto por mucho menos de lo que el jurado considera justo por concepto de indemnización.  En Texas, las compañías de seguros tienen la obligación de llegar a un acuerdo justo y dentro del límite de cobertura en caso de que la responsabilidad sea clara, de acuerdo con la teoría legal denominada Stowers.  Esta teoría representa un incentivo muy poderoso para las compañías de seguros para que negocien el asunto en lugar de irse a juicio.  Un procedimiento de conciliación con tu compañía de seguros puede ser una opción que te puede dar muchas ventajas, tales como tener el control de tu asunto.  Desafortunadamente no hay un proceso similar una vez que el litigio comienza.

Es importante mencionar que al final del día son las partes (no sus abogados) las que deciden si quieren llegar a un acuerdo o irse a juicio.  Después de todo, son sus intereses los que están de por medio.  No obstante, un abogado especializado en materia de seguros puede ayudarte a tomar la mejor decisión en base a las fortalezas y debilidades de tu asunto, y quienes están en la mejor posición de ayudarte a determinar si vale la pena irse a juicio o no.  El equipo legal de la firma de abogados Amaro ha manejado de forma exitosa todo tipo de asuntos de lesiones personales, y cuentan con los conocimientos necesarios para ayudarte a tomar la mejor decisión en base a tu situación particular.  Te recomendamos ponerte en contacto con nosotros para una evaluación gratuita de tu asunto.